Te dejo
Me cansas, me aburres, me irritas, me haces desfallecer.
Eres tan rebuscado, tan recargado, tan exuberante…
Tan barroco que te masturbases con tu sapienza eyaculando metáforas, alegorías, perífrasis, eufemismos, símiles y rodeos.
¿Cómo se puede hacer de una frase un libro?
Si pudiera, te pondría en avance rápido hasta llegar a lo sustancioso, lo interesante, al meollo sin florilegios.
Si acaso adornadito con pequeños detalles literarios nada puristas.
A este paso voy a dejarte, no creo que pueda continuar con este libro.
Yrum, un beso